¿Tiene reglas la improvisación?
A veces necesitamos que otro nos diga lo que sabemos para poder confirmarlo. Eso me pasó en la clínica que dictó Wayne Krantz, el 8 de agosto de 2015 en la Sala Zabala Muniz del Teatro Solís. Manifestó que a veces los músicos disfrutan tocando entre ellos, pero el público se aburre.
Esto generalmente ocurre cuando la música es un despilfarro de ideas, sin forma. Casi un vertedero de frases.
Esto generalmente ocurre cuando la música es un despilfarro de ideas, sin forma. Casi un vertedero de frases.
Hace tiempo que pienso igual. Siempre le pregunto a los alumnos si disfrutan de una persona que habla, habla y habla sin parar.
Me responden con un rotundo No!...
Bueno, les digo; lo mismo te va a pasar si tocas y tocas sin parar...
Esto no es un alegato contra los solos largos, ni cargados de ideas sino contra los vacíos, largos y aburridos. No significa que no apreciemos la exuberancia lingüística de músicos como John Coltrane, o Miles Davis. Nos referimos más bien al tocar por tocar. La sala de espectáculos no es el laboratorio para probar tus ideas. Puede sonar irónico, pero es verdad.
Poniendo reglas
Contaba en la clínica que mencionamos Wayne Krantz
que con un grupo de amigos tocaron nueve años , todos los jueves, en un local nocturno en New York. Ahí sucedía que algunos jueves eran maravillosos, y otros no tanto.
Entonces llegaron a la conclusión que le debían dar forma. Es decir llegar a un acuerdo común de improvisación grupal. Digamos poner pautas o reglas. (En mi caso usaría el término criterios comunes).
Wayne, se refirió a darle la forma de ocho compases. Y trabajó sobre ella, pero para saber más habría que haber ido. No trabajaremos su clínica aquí. El que no fue se lo perdió.
Criterios comunes
En el jazz generalmente se usan los famosos "standars" de jazz, generalmente en la forma de diez y seis, o treinta y dos compases. La primera vuelta es tocada por todos, y es la presentación del tema, usualmente conocido, o leído del también famoso Real Book, una especie de catálogo básico sobre estos temas.
Luego cada músico hace su solo, que debe durar una vuelta. Y la vuelta final es la repetición del tema central.
Colección de Jazz
En el blues se usa la consagrada forma de doce compases.
Pero estos doce se pueden ver como tres partes de cuatro compases. Los cuatro primeros presentan el tema, los cuatro segundos lo desarrollan, y los cuatro finales lo concluyen. No es bien visto tocar los doce de corrido y no diferenciarlos, sino que cada parte es un mini- tema.
El rock es más libre, pero podría decirse que una estrofa generalmente tiene custro versos, y usualmente cada uno dura dos compases, así que si todo esta bien, tendríamos ocho compases.
ero es más libre...
Me responden con un rotundo No!...
Bueno, les digo; lo mismo te va a pasar si tocas y tocas sin parar...
Esto no es un alegato contra los solos largos, ni cargados de ideas sino contra los vacíos, largos y aburridos. No significa que no apreciemos la exuberancia lingüística de músicos como John Coltrane, o Miles Davis. Nos referimos más bien al tocar por tocar. La sala de espectáculos no es el laboratorio para probar tus ideas. Puede sonar irónico, pero es verdad.
Poniendo reglas
Contaba en la clínica que mencionamos Wayne Krantz
que con un grupo de amigos tocaron nueve años , todos los jueves, en un local nocturno en New York. Ahí sucedía que algunos jueves eran maravillosos, y otros no tanto.
Entonces llegaron a la conclusión que le debían dar forma. Es decir llegar a un acuerdo común de improvisación grupal. Digamos poner pautas o reglas. (En mi caso usaría el término criterios comunes).
Wayne, se refirió a darle la forma de ocho compases. Y trabajó sobre ella, pero para saber más habría que haber ido. No trabajaremos su clínica aquí. El que no fue se lo perdió.
Wayne Krantz- Six
En el jazz generalmente se usan los famosos "standars" de jazz, generalmente en la forma de diez y seis, o treinta y dos compases. La primera vuelta es tocada por todos, y es la presentación del tema, usualmente conocido, o leído del también famoso Real Book, una especie de catálogo básico sobre estos temas.
Luego cada músico hace su solo, que debe durar una vuelta. Y la vuelta final es la repetición del tema central.
All of me- Standar
Colección de Jazz
Pero estos doce se pueden ver como tres partes de cuatro compases. Los cuatro primeros presentan el tema, los cuatro segundos lo desarrollan, y los cuatro finales lo concluyen. No es bien visto tocar los doce de corrido y no diferenciarlos, sino que cada parte es un mini- tema.
B. B. King maestro del blues
ero es más libre...
Eric Clapton live- Japón 1988
Por último el free- jazz permite todo, pero no todos se lo pueden permitir...
Por último el free- jazz permite todo, pero no todos se lo pueden permitir...
Ornette Coleman-Free jazz
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