DIVIDIENDO TIEMPOS. De como empezar con simples palabras para llegar a formas de contar profesionales.

         En la escritura clásica de la música el tiempo se mide con lo que se llaman Figuras. Las más conocidas son Redonda, Blanca, Negra, Corchea, Semicorchea, Fusa y Semifusa.

Pero hay más. Cada una de las nombradas es el doble de la siguiente. Cualquiera puede ser tomada como unidad, pero habitualmente se usa a la Negra. De acuerdo con esto podemos dividir a la Negra en dos Corcheas, cuatro Semicorcheas, ocho fusas o dieciséis Semifusas. Pero me faltan divisiones...

Es aquí donde aparecen las figuras irregulares. Po ejemplo, para dividir en tres se usa el Tresillo de Corcheas, que no es otra cosa que tres corcheas donde irían dos corcheas. Esto es 3:2. Luego para dividir en cinco se usa el Quintillo de Semicorcheas (5:4). El Seisillo de Semicorcheas (6:4) y el Sietesillo de Fusas (7:8).

Estrategia

Para realizar la división es de gran ayuda el lenguaje hablado. O sea, crear palabras que dividan el tiempo en partes iguales gracias a el número de sílabas que la forman y su acento. Esto que a veces se aprende sin conocer su origen, en la universidad de la calle, tiene su fundamento en trabajos de pedagogos musicales. Por estas latitudes hispanas y latinas, tenemos algunos ejemplos.

Uno es Violeta Hemsy de Gainza (Tucumán, 25 de enero de 1929) es una pianista y pedagoga musical argentina. De ahí proviene el sistema de usar palabras de dos, tres, cuatro o el número de sílabas que necesitemos.

Por otro lado, Georges Édouard Dandelot (París, 2 de diciembre de 1895 - Saint-Georges-de-Didonne, 17 de agosto de 1975) fue un músico, compositor y pedagogo francés, tenía una particular estrategia: siempre que escribía corcheas en su método de lectura rítmica usaba Do-Re, siempre que usaba tresillos Do-Re-Mi, para semicorcheas Do-Re-Mi-Re, etc.


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